
Guia para la eliminación y reducción de riesgos ergonómicos
Cuando del resultado de la evaluación de riesgos laborales realizada, de acuerdo a lo establecido en el REAL
DECRETO 39/1997, resulte necesaria la adopción de medidas preventivas, deberán ponerse claramente de
manifiesto las situaciones en que sea necesario:
a. Eliminar o reducir el riesgo, mediante medidas de prevención en el origen, organizativas, de protección
colectiva, de protección individual, o de formación e información a los trabajadores.
b. Controlar periódicamente las condiciones, la organización y los métodos de trabajo y el estado de salud de los
trabajadores.
Esta guía ha sido desarrollada para orientar en posibles estrategias que permitan eliminar el peligro o reducir el
riesgo ergonómico. Estas estrategias pueden ser útiles tanto para el diseño de puestos de trabajo como para su
rediseño promovido por la evaluación de riesgos o la mejora continua de las condiciones de trabajo.
Los principios básicos que contribuyen a asegurar la disposición de un entorno seguro para el trabajador se basan
en el equilibrio de las capacidades requeridas por la tarea y las capacidades físicas de la persona trabajadora; el
esfuerzo requerido debería ser compatible con las capacidades físicas de las personas trabajadoras, teniendo en
cuenta la intensidad, la frecuencia y la duración de la exposición.
Una vez implantadas las medidas de mejora en el puesto de trabajo, se recomienda verificar el impacto en el nivel
de riesgo a través de la evaluación específica de los riesgos ergonómicos presentes